Petyr estaba decidido a superar su problema
con la espada. Al día siguiente se encontró con Rashara en el establo y le
pidió un caballo para la tarde, insistiendo en que la silla llevara un alfiler.
Ella le había contado lo del nombre en clave que usaba con Tonel. La cita
estaba concertada pero conforme se acercaba el momento se iba poniendo más
nervioso. Se armó de valor y cabalgó hasta el bosque.
Ella
ya estaba allí haciendo sus ejercicios con la espada. Petyr desmontó y se quedó
mirando embobado a la chica. A pesar de su apariencia masculina y su falta de
modales refinados no dejaba de ser una muchacha. Era todo lo contrario a Cat: castaña
oscura, con el pelo corto y lacio, piel ligeramente bronceada y los ojos
negros. Sólo se parecían en la edad y en la altura. Él era más bajo que ambas. Recordó
el apodo que le puso Edmure, Meñique,
y que tan popular se hizo en Aguasdulces. Lo odiaba porque encerraba una gran
verdad. Se pasó la mano por el pelo para quitarse esos desagradables pensamientos
de la cabeza.
Rashara abrió los ojos
una vez que terminó su entrenamiento. «¡Ya estás aquí! Venga, ahora te toca a
ti», le dijo ofreciéndole el arma. Petyr se levantó del suelo y tomó aire
profundamente. «Llegó el momento y no me puedo negar ¿verdad?», preguntó entre
risas. La chica fingió enfado. «Para nada. Eres mi alumno y puedo ser temible
si te castigo, jajaja.» Él cogió la espada con decisión, pero sin saber qué
hacer a continuación. Rashara le tocó el brazo para corregirle la posición de
guardia al tiempo que le pasaba una mano por la cintura y se colocaba detrás de
él. Se sentía ridículo a merced de una mujer, pero la dejó hacer. Cuando se
separó de él, Rashara estaba muy concentrada, con los labios apretados y el ceño
fruncido. «Muy bien. Ahora cierra los ojos y haz lo que yo te diga.» Esa frase
le recordó al beso que le robó a Cat. Allí estaba ella en el Bosque de Dioses
de Aguasdulces, esperando cualquier cosa menos un beso suyo. El guantazo que le
dio le dolió más que la herida infligida por Brandon Stark. «Escucha los
sonidos, pon atención a tu respiración, a los latidos de tu corazón…
Concéntrate en ti mismo.» Petyr dejó la mente en blanco, borrando la imagen de
Cat. Sólo oía la voz de Rashara. «Conviértete en el bosque… ahora eres el
bosque. Nadie puede verte ni oírte. Eres invisible.» No acertaba a saber por
qué, pero empezaba a sentirse poderoso. El arma, que sujetaba con firmeza, era
una extensión de su brazo. Era invencible, fuerte, un hombre y no un niño
destrozado por las penas de amor. Era Petyr Baelish de Los Dedos, capaz de
hacer todo lo que se propusiera. El pecho le subía y bajaba al tomar y soltar
aire. Respiraba con profundidad, notando cómo los aromas del bosque entraban y
salían de su cuerpo. Perdió la noción del tiempo mientras Rashara seguía
hablando, dándole indicaciones. Después se quedó callada y al final le dijo que
abriera los ojos. «¿Cómo estás?» ¡Estaba mejor que nunca! «No sé qué has hecho,
pero te aseguro que no soy el mismo. ¡Eres fantástica!» Sin pensarlo, le dio un
fuerte abrazo y un beso en la mejilla. La muchacha se quedó rígida por la
sorpresa, aunque después le devolvió el abrazo, pero no el beso. «Bueno, bueno,
han sido demasiadas emociones por hoy. Creo… que debemos volver», dijo
apartándolo. Cogió su caballo y se
adelantó hacia el castillo al galope.
Vaya, parece que Petyr ya no teme coger una espada. Y estos acercamientos, aunque son la mar de inocentes, van cada a vez a más.
ResponderEliminar"Estaba muy concentrada, con los labios apretados y el ceño fruncido." Aquí va a haber lío, lo presiento, jajaja.
Estaba deseando que lo leyeras :3 Espero que te haya gustado ese momento final :)
EliminarEl fruncimiento tenía que salir por algún lado, jeje...
Madre mía, estos dos están cerca de que tengan tema. Petyr empieza a pensar más en Rashara y ya le ha dado un beso. Lo del fruncimiento de ceño me ha recordado a cierto Señor que ya conocemos, jajaja. Me ha gustado mucho.
ResponderEliminarJulia Stark
Un besito inocente... :3
EliminarLo del ceño es algo que Kahlan89, Elora y yo quedamos en poner en nuestros fics, jajaja.
Gracias por comentar.
Que linda escena jeje, a estas alturas no veo nada más que una pura amistad entre Rashara y Petyr, se ayudan y apoyan, me alegra porque le hacía falta esa clase de afecto a nuestro amigo.
ResponderEliminarMe fascinan cada que van al bosque, siento que hay más paz y serenidad, gracias por al capítulo Athena.
Sí, Rashara ha sido de mucha ayuda para Petyr :3
EliminarOh lovely him! he can't control himself and he hugs and kisses her! oh well..it was more a friendly hug...maybe going on...hope!
ResponderEliminarAnd he feels better! ohhhh, so cute! he felt free! <3
Dora.
We will see what happens with that hugh and kiss ;)
EliminarAmé el capítulo... que maravillosa descripción de sensaciones...
ResponderEliminarXim a Cuerda
Muchísimas gracias por todos los comentarios que has ido haciendo en cada capítulo. Me alegro un montón de que el fic te esté gustando, tanto la historia como la manera de contarla. Espero que se mantenga tu interés y que lo disfrutes leyendo tanto como yo lo he hecho escribiendo esta ficción.
Eliminar¡Saludos!
Ese ceño fruncido que no me falte que cada vez que lo leo me arranca una sonrisa. Me voy a por el siguiente, es lo bueno de saltarte algunos, que luego te lo lees de tirón y tu emoción va a más un rato seguido. Eres un libro. Muak.
ResponderEliminarCristina.
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminar