AVISO

Este fic contiene especulación y recreación de hechos del pasado y mucha ficción. Todos los personajes y lugares pertenecen a G.R.R. Martin, excepto los creados por mí.

sábado, 15 de junio de 2013

Capítulo 39


A pesar de que no le agradaba la idea, Lysa tuvo que acudir finalmente a Lord Varys. Clem no había conseguido mucha más información sobre la misteriosa Alyn. Si era verdad que La Araña sabía todo lo que ocurría en los Siete Reinos, no le sería difícil desentrañar el misterio que rodeaba a esa joven, encontrar algún punto débil en ella y usarlo en su contra.

            Lord Varys estaba en una habitación que hacía las veces de despacho personal. Cuando Lysa entró, un muchachito despeinado y descalzo salió despedido de allí. Era uno de los pajaritos, estaban por todas partes. Lord Varys la saludó con una reverencia y le indicó un asiento. «Lady Arryn, es un honor tenerla aquí. ¿Qué puedo hacer por vos?» Lysa se aclaró la garganta. El embarazo le daba una sensación de sed continua y pidió un poco de agua. Una vez que bebió, comenzó a hablar. «Estoy aquí porque necesito de vuestra ayuda para un asunto personalLa Araña se sentó y unió las manos bajo su barbilla con aire satisfecho. «Lo que me digáis no saldrá de aquí. Os doy mi palabra.» «¿Y cuánto vale esa palabra?» Lord Varys sonrió. «Para vos, nada. Es un placer servir a la esposa de la Mano del Rey. Es más: siento hasta curiosidad por lo que me vais a pedir y eso es para mí una diversión. Me aburro tanto aquí, sin nadie con quien charlar…» Lysa expuso su caso. «Hay cierta persona en Puerto Gaviota cuya identidad me interesa. Se trata de una mujer de unos veinte años, con el pelo castaño y liso, que trabaja de ayudante de un afamado orfebre de la ciudad, un tal Ollyan. Aquí tenéis más sobre ella.» Le alargó un folio que el hombre leyó con atención. «No sé su nombre real, pero usa el de Alyn actualmente», comentó Lysa. «Mmmm… son pocos datos, pero veré qué puedo hacer. De todas formas, ese nombre no es desconocido para mí. Tuve un pajarito que lo usaba para obtener información que yo compraba. Incluso siguió proporcionándome suculentos susurros durante la guerra. Sabía que Alyn no era su nombre real, pero eso me daba igual.» Lord Varys se quedó pensando. «A lo mejor estamos hablando de la misma persona, la descripción coincide, aunque hace muchos años llevaba el pelo corto. Sé que suena imposible, pero las casualidades existen.” Lysa volvió a beber agua. «Entonces, si es la misma persona, ¿trabajó durante la guerra para los Targaryen?» «En efecto. Esta muchacha estuvo aquí, en Desembarco, hace mucho tiempo, cuando era una cría. Después se desvaneció. Siempre sospeché que su madre huía de algo o de alguien. A pesar de usar un nombre tan neutro como Alyn, su aspecto era de dorniense.» «¿Y qué hacía por aquí?» preguntó Lysa. «Ya os he dicho que no lo sé, pero no tenía padre y eso puede darnos una pista: con toda probabilidad era una bastarda de algún hombre importante de Dorne. El caso es que, tras años sin saber de ella, apareció de pronto durante la guerra, pero esta vez sola. Me ofreció sus servicios y, de hecho, fue ella la que me informó de las intenciones de Lord Tywin de saquear Desembarco. Una pena que Aerys no me hiciera caso y abriera las puertas al Lannister.» Lysa sonrió con aire sibilino. Era un golpe de suerte inesperado para hacer un trabajo limpio, incluso legal… «Entonces, si espió para los Targaryen en tiempos de guerra y ella misma era dorniense, se la puede acusar de traición a Robert, ¿no?» Lord Varys soltó un bufido. «Un momento, Lady Arryn. Yo también trabajé para Aerys y sigo en mi puesto. Si empezamos a acusar a todo el mundo de haber estado de un lado u otro durante la guerra, esto se haría interminable. Además, nuestro actual rey, Robert, fue misericordioso incluso con el Matarreyes y Ser Barristan Selmy, miembros ambos de la anterior Guardia Real.» Lysa soltó una carcajada. «¿Teméis por vuestra vida, Lord Varys? No os preocupéis. Robert conoce bien vuestros servicios. El caso de esta chica no es comparable con el vuestro… Me gustaría que se tratara con cierta… discreción.” La Araña se levantó con parsimonia. «Os he dicho que mi trabajo no os iba a costar nada, que sólo necesito saciar mi curiosidad. ¿Qué tenéis en contra de esa mujer?» Lysa se puso tensa y la sonrisa se le borró del rostro.» «Se ha apropiado de algo que me pertenece. Confío en que la detendréis acusándola de espionaje. Y quiero que sea cuanto antes.»

7 comentarios:

  1. Ya sabía yo que algo de esto iba a pasar. Y tiene todo el sentido del mundo porque ya sabemos en lo que se va a convertir Petyr.

    Lo que más rabia me da es que Lysa es capaz de aliarse incluso con Lord Varys (un hombre del que desconfía y al cual teme) solo para acabar con Rashara. Despreciable.

    Ahora la odio aún más que antes.

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  2. Oh bad, bad Lysa... Varys is dangerous... but I think he couldn't hurt Rashara just because Lysa asked him... I don't know... it will be harder now...

    Dora

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  3. Lysa...grrrrr... ya casi tiene a Rashara!!!!!. Maldición!!!! ella debería desaparecer. Que ser más despreciable.
    Xim a Cuerda

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  4. Ay que mirada sucia que tengo que al salir despeinado el muchacho de donde Varys me he ido por otros derroteros, jajajaja.

    Sale jaime: "- Me llamo Jaime", me encanta, jajajaja, me encanta como hilas las cosas, como las cuentas, ME ENCANTA.

    y la loca ¡¿WTF?! "Se ha apropiado de algo mío". la gente no pertenece, la gente acompaña; mira que entiendo que el amor puede doler y que tú quieras y no te quieran es jodido, pero vaya... Ainssss.

    Cristina ;)

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  5. Malvada Lysa, está pero mal, a ver que pasa con nuestros enamorados ante tal amenaza.

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