Rashara se encontraba cerca de la casa de
Petyr. Tenía dos encargos que entregar y tiempo de sobra para pasar por allí.
Era la hora de comer y a lo mejor, con suerte, él estaba en casa. Sería una
pequeña sorpresa antes de volver a sus quehaceres.
Llegó
hasta la puerta y llamó, porque no llevaba la llave encima. Parecía que no
había nadie. No le extrañó, porque Petyr comía a veces en el edificio de
aduanas. Rashara sonrió. Qué trabajador era y qué responsable. Pensó en acercarse hasta allí y, cuando ya se
daba la vuelta para irse, la puerta se abrió. «¡Rashara! ¿Qué haces aquí? ¿No
viste mi nota?» Petyr iba a medio vestir y a ella le dio la sensación de que le incomodaba
su presencia. «No he pasado por el taller en toda la mañana. Estaba haciendo
unas entregas cerca y pensé en darte en una sorpresa.» Él salió cerrando la
puerta con cautela. «Siento no invitarte a pasar, pero es que hoy no me
encontraba bien y he venido a descansar un poco.» «¿Quieres que me quede
contigo a cuidarte? Te puedo preparar algo que te ayude a dormir si lo deseas.» Petyr miró hacia el interior de la casa. «No, no, de verdad. Ve a hacer tus
entregas. Esta tarde te mandaré un aviso si te necesito. No te preocupes por
mí.» Le dio un beso rápido y desapareció dentro. Rashara estaba perpleja. Petyr
le estaba ocultando algo. Lo había notado inquieto, como deseando que ella se
marchara de allí. Pero no tenía tiempo para quedarse a averiguarlo.
Después
de hacer su trabajo, volvió al taller del orfebre, que le entregó la nota de
Petyr. La tomó sin leerla. Comió un poco y se puso a hacer algunos diseños que
Ollyan le pidió. No se concentraba pensando en la salud de Petyr y en su
extraño comportamiento de esa tarde. Abrió la nota y la leyó. En ella no decía
que estuviera enfermo, sino que no estaría en casa a la hora de comer. Es más:
Ollyan le dijo que el mismo Petyr la había traído en persona. Notó algo
parecido a los celos. ¿Estaría Lysa con él? Si así fuera, no había nada de malo
en presentársela. ¿Acaso se avergonzaba de ella? Ahora los celos se mezclaban
con la curiosidad. ¿Cómo sería Lysa? ¿A qué habría venido a Puerto Gaviota
desde Desembarco del Rey? Dejó el trabajo a medias y, sin decir nada a Ollyan,
salió hacia la casa de Petyr decidida a saber qué le pasaba realmente.
En el próximo capítulo vendrán todos los problemas, aunque Rashara ya se imagina que está haciendo Petyr dentro. Se acerca el final y casi parece un capítulo 9 de Juego de Tronos.
ResponderEliminarJulia Stark
A ver, a ver... No está segura de si él está en compañía de Lysa.
Eliminar:O
ResponderEliminarI'm happy that Rashara hasn't known the reality yet, but I can't get over the fact that Petyr opens the door and he isn't completely dressed!!! Please...
Btw, she wants to know, of course, she suspects something and she isn't stupid... I'm sure she will know it soon :(
Dora
At the beginning, she thought he was sleeping, but...
EliminarAy madre mía, ay madre mía, AY MADRE MÍA.
ResponderEliminarMenos mal que sé que mañana publicas el nuevo capítulo porque sino me da un ataque xD
Jajaja, una tila hasta mañana e.e
EliminarHostias que esta también tiene un par de huevos. Voy a por el siguiente!!!!!!!!!!
ResponderEliminarCristina xDDDDDD
Ah, que angustia, seguro acabará metido en un gran problema, conociendo a Rashara si lo atrapa con Lysa no la volverá a ver. u-u
ResponderEliminar