AVISO

Este fic contiene especulación y recreación de hechos del pasado y mucha ficción. Todos los personajes y lugares pertenecen a G.R.R. Martin, excepto los creados por mí.

viernes, 17 de mayo de 2013

Capítulo 10



Petyr la estaba evitando. Hacía cuatro días que no aparecía por las cuadras para pedirle un caballo. ¿Qué hizo mal en el bosque? Fue él el que quiso coger la espada, pero fue empuñarla y empezar a temblar. Rashara le daba muchas vueltas a las razones que llevaron a Petyr a salir corriendo y no daba con ninguna que tuviera lógica. Además ¿qué sabía de él? Absolutamente nada. ¿Tendría su reacción algo que ver con su pasado antes de volver a Los Dedos? Él no parecía dispuesto a contarle nada y ella no veía la manera de sacarle información.

            Envió a uno de sus compañeros de la cuadra a la casa con un mensaje. «Dile al hijo de Lord Baelish si hoy va a querer montar a caballo, porque hay uno de su gusto que está libre.»  Esperaba que Petyr entendiera el doble sentido. Estaba nerviosa mientras que aguardaba la respuesta. El mozo volvió unos minutos después. «Me ha dicho el señor que sí, que vayas preparando la montura.» Rashara tuvo que ahogar una risa de placer. ¡No estaba enfadado con ella! Respiró hondo y empezó a colocar los aparejos sobre la yegua que le dio el día que se conocieron. Seguro que él agradecía el gesto.
            Petyr tardó media hora en aparecer. Tal y como tenían acordado, no se dijeron nada que dejara traslucir su acuerdo secreto. Rashara sacó la yegua al patio y ayudó al muchacho a montar. Después volvió al establo y siguió con su tarea. Cuando terminó, tomó un caballo y fue hacia el bosque.
            El chico estaba esperándola con los pergaminos en la mano y masticando hojas de menta. Rashara desmontó y se acercó a él. «¿Has estado enfadado conmigo?» Él negó con la cabeza. «No, tú no tienes culpa de nada. Es sólo cosa mía.» Ella notó que no le iba a sacar mucho más. Se sentó a su lado. «¿Por qué estás siempre masticando hojas de menta? ¿Es que estás enfermo o algo así?» Petyr bajó la cabeza pestañeando lentamente, al tiempo que sonreía. “Es una costumbre que tengo desde hace un tiempo.» Le ofreció unas hojas. Rashara se las echó a la boca y empezó a masticarlas. «Bueno, no están mal y te dejan un aliento fresco. Seguro que todas las damas importantes tienen un aliento de menta.» «Estás equivocada. Lysa siempre decía que las damas tenían sabor a fresa en sus bocas.» La muchacha se sobresaltó. ¿Había dicho Petyr un nombre de chica? Ahí estaba la punta del hilo del que tirar para saber algo más de él. «¿Quién es Lysa?» El muchacho se puso serio. «Nadie… Bueno, fue amiga mía durante años.» ¿Qué clase de respuesta era ésa? ¿Era nadie o era una amiga? Petyr se cerró en banda y cambió de tema. Tomó el pergamino e hizo que Rashara leyera lo que él había escrito y lo copiara después. No volvió a hablar de nada personal el resto del tiempo.

            Después de la clase, regresaron al castillo y se separaron cordialmente antes de entrar para que nadie los viera juntos. Petyr no aparentaba estar enfadado, pero Rashara no sabía a qué atenerse con él. Primero fue lo de la espada y después lo de esa chica, Lysa. Qué difícil era tratar con ese muchacho extraño. Fue Petyr el que buscó su compañía, no ella. ¿Qué quería realmente? A lo mejor la estaba utilizando para propósitos que desconocía. Siempre le estaba preguntado cosas sobre Desembarco del Rey. ¿Sería Lysa de allí? No, qué tontería. Si tanto interés tenía en la capital era porque nunca habría estado en ella. ¿Dónde había vivido antes de volver a Los Dedos? Eso era lo que más la intrigaba.
            Iba concentrada en sus pensamientos cuando llegó a su casa. Ryene la esperaba para comer. Charlaron de cosas sin importancia y su madre le hacía preguntas a las cuales la muchacha respondía con monosílabos. «Rashara, estás como ausente. ¿Pasa algo?» «No, no, es que estoy agotada de limpiar los establos. Esos animales ensucian más que comen, jajaja.» Ryene no quedó convencida por la respuesta, era difícil engañar a su madre. «El brillo de tus ojos no indica precisamente cansancio. Dime qué te pasa. Me preocupo por ti.» Rashara no tenía respuesta, ni ella misma era capaz de explicarse. Además, si le contaba a su madre que andaba por ahí con Petyr se enfadaría. «Bueno, hay un chico de los establos que…» Era una mentira a medias, porque ese chico existía y se llamaba Arty, un mozo que parecía ir detrás de ella. Ryene se puso alerta. «Tranquila, madre, no es lo que piensas. Él está interesado en mí, pero yo en él no.” «Hija mía, debería haberte hablado de todo esto mucho antes. Sabes que yo te tuve con dieciséis años ¿no? Era sólo una cría…» Rashara se sentía incómoda porque su madre nunca le había contado nada sobre su vida ni sobre su padre. Lo único que sabía era que él murió al poco de que ella naciera. «¿Nunca te has preguntado por qué no te hablo de tu padre?» La muchacha se puso tensa. La verdad era que ella tampoco había preguntado sobre él, era una especie de tema prohibido, un tabú entre madre e hija. Reyne seguía hablando. «¿No quieres saber por qué salimos de Dorne y nunca más volvimos?» ¿Quería saberlo? Intuía que se iba a enterar de algo que no le iba a agradar. «No. De momento prefiero permanecer en la ignorancia. Soy feliz aquí, contigo. No necesito nada más.» Ryene parecía decepcionada con su reacción. «Perdóname, madre. Voy a echarme un poco. Realmente estoy cansada.»

8 comentarios:

  1. Oh, toughtful Rashara... she really likes Petyr, but he is still in Riverrun with his mind...
    maybe one day he could really like Rashara...hope.

    Dora.

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  2. Oye, Rashara a lo mejor no quería saber nada de su padre pero yo sí!

    Y ya se nota como ella y Petyr van confiando más el uno en el otro, aunque sea muy poquito.

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    1. Jejeje, me estoy volviendo un poco como Martin, dejando cosas caer sin decir nada e.e

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  3. La relación de Petyr y Rashara va aumentando y está muy, muy bien. Me encantan esos dos.Y ahora tengo mucha curiosidad por saber quién es el padre de Rashara. Lo seguro es que es de Dorne....

    A esperar el próximo.

    Julia Stark

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    1. Me alegro de que esté interesando la relación entre los dos. Es muy importante para mí. :3

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  4. Rashara me ha dejado con la duda... de quién es hija????... tantas intrigas... me matan!!!
    Xim a Cuerda

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  5. El plante de la chavala me ha encantado, a veces hay que estar cómodo en el no saber, una lección de humildad. Voy a ponerme al día ;)

    Cristina

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